El cambio climático nos afecta más de lo que podemos pensar a priori, ya que incluso nuestro tiempo de ocio puede convertirlo en un momento muy peligroso, sobre todo si estamos dentro de una piscina de mar. Esto es debido a que cada vez es más frecuente encontrarse con medusas, las cuales van aumentando en cantidad gracias a que sus enemigos naturales están extinguiéndose o migrando a otras zonas en las que la temperatura del agua es más fresca, consiguiendo con las altas temperaturas que estos seres se reproduzcan con más rapidez y por lo tanto, sea más frecuente encontrárselas en las orillas de las playas, piscinas de mar y puertos. En esta guía te vamos a responder a la pregunta de si existen piscinas de mar anti medusas y cómo funcionan.
Las medusas son seres vivos que pueden llegar a las costas y que, en caso de picarte pueden provocarte muchos problemas, por un lado pueden causar una hinchazón de la zona donde sus tentáculos han tocado tu piel, pero en caso de ser medusas mucho más venenosas, puede hacer que tu vida corra mucho peligro, por eso es imprescindible que tengas ante todo una seguridad extra para evitar cualquier contacto con ellas, las cuales, al ser muy sigilosas y al moverse por debajo de la superficie del mar, pueden pasar desapercibidas hasta el momento de la picadura.
Para que lo que hemos descrito anteriormente no ocurra y puedas disfrutar del agua del mar en todo su esplendor y con una calidad inmejorable se han creado las denominadas piscinas de mar antimedusas que cuentan con una serie de ventajas que no solo van a ayudarte a que etés seguro nadando en un recinto libre de medusas, sino que también mantendrás alejados todos los contaminantes que puede tener el agua, desde aceites, plásticos, materiales orgánicos o incluso algas, consiguiendo que dentro de dicho recinto esté el agua completamente limpia y que además, por otro lado, sea un lugar muy seguro en el que poder estar.
Las piscinas de mar cuentan con unas cualidades impresionantes, las cuales puedes encontrar leyendo la guía de Vacaciones10.top y que nosotros resumiremos brevemente. Se trata de un cuadrado o anillo flotador gigante que se va a colocar sobre la superficie del mar y que estará flotando. Esta estructura realizada con plástico resistente y que se puede llenar a máquina o con un inflador, cuenta con una red que está elaborada con una malla extremadamente fina, consiguiendo de esta manera que toda la suciedad y por supuesto, las medusas queden fuera de lo que ocurre dentro de este recinto sobre el mar. Estas piscinas pueden quedarse flotando en el mar, con la seguridad de que no se va hacia alta mar, como también si tienes un barco, un yate o una barcaza poder amarrarla fácilmente a uno de los costados, consiguiendo de esta manera que no se mueva de su sitio y que, cuando os vayáis a meter en su interior, tengáis la seguridad de que nada os va a atacar.
La colocación de estas piscinas es bastante sencilla y lo único que tienes que tener en cuenta es que si la colocas en alta mar, deberá de estar antes que nada amarrada al barco en el que nos encontremos para que no se separe. Lo principal es inflarla bien, que quede resistente y una vez que hayas hecho esto, colocarla en el agua con precaución, siempre con la red de malla en su lugar, para evitar que al colocarlo mal se cuele alguna medusa o cualquier otro pez. Estos recintos o piscinas de mar antimedusas son perfectas para toda la familia, desde adultos hasta los más pequeños, siempre que se den algunas directrices de su utilización, como bien puede ser el que no se debe de tocar la zona inflada ya que podría ocasionar que si se baja del nivel o superficie, entraría la suciedad del exterior o incluso alguna pequeña medusa.
Por otro lado, la red de malla al ser tan pequeña, actuará como una especie de filtro, por lo que el agua que esté en el interior de la piscina será limpia y no contendrá ningún tipo de contaminante, sin embargo, se debe de revisar cada cierto tiempo para comprobar que se encuentra en perfectas condiciones y que ninguna de sus costuras está cediendo, algo que puede ocurrir al rozar con el barco o incluso si algún desecho del mar lo ha dañado. Si no se revisa periódicamente corremos el riesgo no solo de que entre suciedad en nuestra piscina, sino también que se cuele alguna medusa y que pueda picarnos a nosotros o a nuestra familia y amigos.